Beneficios de usar el cinturón de seguridad

usar cinturón de seguridad

El cinturón de seguridad es uno de los elementos de seguridad clave de nuestro vehículo. Su uso es obligatorio en la mayoría de los casos, y no llevarlo es objeto de sanción, además de ser muy peligroso para nuestra salud. Así lo ha determinado la Dirección General de Tráfico en sus múltiples estudios, gracias a los que podemos conocer las consecuencias a las que nos exponemos si no lo usamos.

El cinturón de seguridad: Clave en nuestra seguridad

Cuando nos subimos a nuestro vehículo, debemos protegernos adecuadamente para proteger nuestra salud en caso de accidente. Son muchas las posibilidades de sufrir un incidente a lo largo de nuestro trayecto, circulemos por carretera o por ciudad. Las velocidades que puede alcanzar nuestro vehículo pueden agravar las dimensiones de un posible impacto, y poner en serio peligro nuestra supervivencia. Los estudios hablan claro; sufrir una colisión a 50 km/hora es comparable a caer desde un tercer piso, y si lo hacemos a 120km/hora, la equivalencia aumenta a un piso 14.

Son muchos los factores que pueden provocar una colisión, algunos de los cuales no dependen de nosotros. No obstante, proteger nuestro cuerpo con las medidas de protección adecuadas recae bajo nuestra responsabilidad, y hacer uso del cinturón es una de las maneras más básicas y eficientes de conseguirlo. A pesar de su obligatoriedad y sus beneficios, se calcula que un 20% de los conductores prescinden de usarlo en sus trayectos, poniendo en serio peligro su vida. Este porcentaje es mayor cuando se trata de los asientos traseros, en los que se estima que un 30% no hace uso de ellos.

¿Qué beneficios posee usar el cinturón de seguridad?

Son muchos los beneficios asociados al uso del cinturón de seguridad. Entre ellos, encontramos algunos de especial importancia:

Reducir significativamente el riesgo de muerte ante un impacto

Se estima que las posibilidades de perder la vida en un impacto se reducen en un 50% si llevamos puesto el cinturón de seguridad. Este es el principal motivo por el que su utilización está claramente justificado y es de obligatorio cumplimiento. Gracias a él, las muertes en carretera han descendido notablemente en la última década, aunque todavía queda mucho por hacer.

De la misma manera, el cinturón de seguridad previene lesiones graves en nuestro organismo como fruto de un accidente. Por ello, es un claro elemento protector de nuestra salud y supervivencia.

Inmoviliza nuestro cuerpo ante impactos fuertes

El cinturón de seguridad nos mantiene sujetos al asiento, bloqueándose ante impactos capaces de desplazar nuestro cuerpo del asiento. Esto tiene un claro efecto positivo en nuestra salud, pues impide que nuestro cuerpo pueda salir disparado e impactar contra el parabrisas, el volante u otros elementos de nuestro vehículo.

Su efectividad en los asientos traseros también resulta alta: es capaz de reducir y evitar de manera significativa que los ocupantes de los asientos posteriores golpeen a los ocupantes delanteros, produciéndoles graves daños que dificultarían el posible control del vehículo en estas situaciones.

No obstante, su mayor efectividad se produce en caso de vuelco, reduciendo en un 77% el riesgo de perder la vida en ello.

Aumenta nuestra seguridad, lo que interfiere positivamente en nuestra conducción

Cuando respetamos las principales medidas de seguridad, llevamos a cabo nuestra conducción de manera mucho más tranquila y pausada. Esto, sin duda, afecta de manera positiva a nuestra capacidad de resolución de aquellos problemas que podemos encontrarnos en la carretera. Disfrutar de una conducción más tranquila y pausada mejora, también, nuestra experiencia al volante y nos ayuda a mejorar nuestra conducción, instaurando buenos hábitos al volante.

A la vista están las enormes ventajas físicas y psicológicas que nos ofrecen el cinturón de seguridad, no solo cuando nos sentamos al volante, sino también cuando ocupamos cualquiera de los asientos de acompañante. En aquellos casos en los que deban incorporarse cinturones alternativos y/u otras medidas de protección, como pueden ser en el caso de embarazadas y/o bebés y niños, se deberá atender a las recomendaciones de la DGT y hacer uso de productos homologados, para garantizar una seguridad óptima que nos permita conservar la salud de la totalidad de viajeros ante cualquier accidente.

 

Prevención y Prudencia, tu seguridad es lo más importante para nosotros.

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