¡Cuida de tu velocidad al volante con estas recomendaciones!
Son muchas las personas que realizan un uso urbano de su vehículo. Los trayectos más habituales suceden por ciudad, y suelen realizarse a diario. Tan solo necesitamos darnos cuenta de la gran cantidad de tráfico y atascos que se producen en horas punta. Esta afluencia de vehículos crea problemas en carretera; unido a las distracciones y el incumplimiento de las normas de seguridad vial, el exceso de vehículos en las carreteras urbanas puede crear colisiones y otros incidentes. En Leaseplan te ofrecemos unas claves para que puedas llevar a cabo una conducción más segura por ciudad, minimizando el riesgo de sufrir este tipo de incidentes.
Claves para conducir por ciudad de manera segura
1. Toma conciencia del escenario y todos sus participantes
Mucho se habla de la seguridad al volante en carretera, pero lo cierto es que conducir por ciudad posee un riesgo mayor, si atendemos a todos los elementos que interaccionan en el lugar por el que circulamos. El tráfico, compuesto por diferentes tipos de vehículos (camiones, furgonetas, autobuses, coches, motocicletas, bicicletas…) supone un problema para mantener una velocidad estable. Los semáforos regulan el paso de estos vehículos y de los peatones, que forman parte del escenario y también influirán en nuestra marcha. Este conjunto de elementos debe comunicarse a la perfección para crear escenarios seguros para todos.
Es por ello que se necesita tomar conciencia del escenario y de todos sus elementos, y facilitar la coordinación de todos ellos. Los semáforos y señales facilitan la tarea; conocer a la perfección el significado de sus simbolismos y respetar las normas viales resulta fundamental para conseguir un entorno seguro.
2. Cuidado con el estrés
El estado de ánimo tiene una gran influencia en la manera de conducir. Nuestros problemas diarios pueden llevarnos a conducir de manera agresiva y peligrosa. La conducción, además, es una de las actividades más estresantes que existen, sobre todo si el trayecto se produce por ciudad y existe mucho tráfico a nuestro alrededor.
No obstante, debemos ser conscientes de los peligros que entraña sentarnos al volante y cuidar nuestro nivel de estrés cuando estemos circulando. Si nos estresamos con facilidad, conocer el estado del tráfico es esencial para poder evitar atascos y optar por llevar a cabo rutas alternativas más tranquilas. Evitar conducir en esos días de mayor estrés puede ser, también, una buena manera de aumentar nuestra seguridad.
3. Respeta la velocidad máxima permitida
La ciudad entraña peligros. Las calles suelen ser estrechas; los giros, cerrados; los vehículos aparcados reducen la visibilidad del entorno y, además, debemos contar con la presencia de pasos de peatones, entre otros. Todo ello demanda respetar los límites de velocidad establecidos en cada zona o tipo de vía.
Son muchos los conductores que exceden de la velocidad permitida continuamente, aumentando el riesgo de provocar una colisión. Respetar los límites de velocidad contribuye a crear entornos más seguros para todos y mejora la capacidad de gestión de dificultades.
4. Respeta los semáforos
Se estima que el 80% de siniestros graves que se producen en ciudad se producen debido a que alguno de los elementos que intervienen no ha respetado las señales que nos indica un semáforo.
Los semáforos coordinan el tráfico, no solo de vehículos, sino también de bicicletas y peatones. Su sistema de colores otorga periodos de preferencia a cada uno de estos grupos, y deben ser respetados por todos. En caso contrario, existe mayor riesgo de colisión y atropello.
5. Las rotondas
Las rotondas y glorietas suponen lugares donde se producen un alto número de incidentes, debido a la complejidad de circulación que entrañan. No obstante, si se cumplen las normas de circulación, estos riesgos se reducen de manera considerable. Ceder el paso antes de introducirnos en ella, así como acercarnos al carril exterior a medida que se acerca nuestra salida, son normas fundamentales para poder establecer una buena coordinación con el resto de vehículos que participan en la circulación.
Cumpliendo con estas claves, lograremos mejorar la circulación por ciudad y minimizar el riesgo de sufrir colisiones y otros incidentes.
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